Estatutariamente la
Asociación tiene como objetivos los siguientes:
- Conservar y acrecentar entre sus miembros los principios religiosos que recibieron en sus años de alumnos.
- Mantener y aumentar entre sus asociados las relaciones de amistad y compañerismo contraídas en la infancia y juventud.
- Estrechar los lazos que les unen a sus antiguos profesores, cooperando en su labor educativa y social.
- Procurar entre sus afiliados la mutua ayuda material y moral.
Con
este fin, el pasado día 8 de julio
se reunieron en el Colegio los alumnos que cumplían 50 años de su graduación
como bachilleres superiores.
El
acto se inició en la sala HARA del Colegio donde fueron recibidos por el H.
José Ramón Palma (actual director), H. Francisco Ruiz (asesor religioso de la
Asociación) y por José Madrazo Revilla (actual presidente de la Asociación).
Tras
un breve saludo y ambientación del acto a cargo del H. Francisco, se pasó a
leer por uno de los asistentes el evangelio que nos narra el encuentro de Jesús
con los discípulos de Emaús (Lucas 24, 13-35), el salmo responsorial correspondiente
y las plegarias compartidas, donde se recordó a los compañeros y profesores
ausentes.
Entonado
el canto a San Juan Bautista de La Salle, recordado por todos los asistentes, tomó
la palabra el presidente de la Asociación, interviniendo posteriormente el H.
Director.
Como
colofón del acto, se impusieron las becas e insignias de los antiguos alumnos a
los asistentes y se entonó el himno al Colegio.
Todos
los asistentes dieron un breve paseo por el interior del Colegio, salas de
reunión, salón de actos (cine), clases donde pasaron los años de vida escolar,
etc… todo ello salpicado de innumerables detalles y anécdotas de aquellos años
vividos intensamente.
Para
terminar este encuentro, se realizaron las correspondientes fotos del grupo en
las gradas del patio y junto a la “leona” del jardín colegial.
Posteriormente
se trasladaron a las instalaciones de La Real Sociedad de Tenis de La Magdalena donde
degustaron una estupenda comida de fraternidad, dando por terminado un día
inolvidable.